La agresividad y educación de nuestro perro.
La agresividad Y educación
La mayoría de las actitudes agresiva de los perros depende de la educación que reciben por parte de sus propietarios y no a la raza a la que pertenecen.
Muchos perros son sacrificados o abandonados por su actitud agresiva pero contrariamente a lo que se piensa en la conducta violenta del perro, la raza tiene poco protagonismo respecto a todos los factores que dependen del dueño.
Por mi experiencia en el mundo del perro como profesional los factores externos son modificables y los que dependen del dueño son los que más influyen a la aptitud del animal, el hecho de que los propietarios no hayan tenido un perro antes y el no someterlo a un entrenamiento básico de obediencia y el consentir al perro en exceso, atender todas las demandas del animal, no emplear el castigo o corrección de “tipo físico o emocional” cuando es necesario, dejar la comida de forma indefinida o dedicarle poco tiempo condicionan la actitud del animal, por otra parte asegura que determinados elementos dependientes del perro que están asociados a una mayor agresividad por dominancia, los perros serán más o menos dominante según este orden: el tamaño, la familiaridad con el lugar, la edad y el sexo.
También se da el caso de que los hijos de padres dominantes también lo serán e igual pasa con las mascotas, ya que influye de forma directa el ambiente en el que se críen. Está demostrado que también tiene más influencia el genotipo, de manera que se puede adoptar la dominancia o agresividad de unos padres adoptivos como nosotros los humanos, sin embargo estos factores representan un peso mínimo en el comportamiento agresivo del perro. No es normal que los perros que reciban una educación adecuada mantengan comportamientos agresivos de dominancia y en el caso de que esto ocurra se podría deber a algún problema médico u orgánico que puede provocar cambios de conductas en el perro.
Hay estudios que parte del dato de que cerca del 40% de las agresiones por dominancia de los perros están relacionados a propietarios poco autoritarios que nunca han realizado entrenamiento de obediencia básica a sus perros o en el caso de que lo hayan hecho ha sido de forma mínima y mal asesorados.
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